Con Ferran Adrià mantengo un debate y una creencia. Desde el año 2006 en que presentamos juntos el caso de «elBulli» en Expomanagement mantenemos un debate sobre si tenía una estrategia, o no. Ferran Adrià sostiene que no había una estrategia y que las cosas fueron surgiendo de forma espontánea. Mi opinión es que el éxito del «elBulli» es un ejemplo de búsqueda persistente de una diferenciación a través de la creatividad, un esfuerzo sostenido a lo largo de muchos años. Seguro que no había una estrategia estrategia formalizada en un papel, pero Ferran Adrià y Juli Soler son unos emprendedores que siempre tuvieron una visión de «elBulli» que querían desarrollar.
En cualquier caso, el nuevo libro de Vicente Todorí y de Richard Hamilton o la reciente clasificación de la revista «Restaurant Magazine» donde «elBulli» repite como mejor restaurante del mundo, por quinto año, es una muestra del su éxito actual. Como dijo el creativo Toni Segarra el pasado sábado en TVE, durante el debate que cerraba la semana dedicada a «elBulli»: la palabra clave hoy es oportunidad. El reconocimiento mundial de Ferran Adrià y otros cocineros españoles es una gran oportunidad para un país. El reto ahora es como aprovechar este prestigio y reconocimiento internacional para impulsar nuevos proyectos. En esta crisis, de tanto buscar nuevos brotes verdes, quizás no somos capaces de ver los arboles frondosos que ya tenemos.